Los primeros pasos de Rubén hacia sus sueños

Rubén tiene 18 años  y vive con su mamá y dos hermanos menores en la ciudad de El Alto, en La Paz. El Alto es una de las ciudades de mayor crecimiento en el país. Al vivir con una madre soltera Rubén pasó gran parte de su niñez rodeado de amigos, a sus 13 años presionado por su grupo de amigos comenzó a tomar bebidas alcohólicas, lo que comenzó como una actividad esporádica se convirtió en un hábito casi diario en su vida, “mi mamá no sabía lo que hacía, siempre le mentía para no preocuparla, pero después de clases mis amigos y yo íbamos a tomar a la calle”.

A sus 16 años Rubén vivió una de las experiencias más dolorosas de su vida, su mejor amigo fue asesinado “él era como mi hermano mayor, me cuidaba y protegía… cuando me enteré de lo que pasó no podía creerlo. Después de eso comencé a tomar más (alcohol) ya no podía parar… no aguantaba el dolor”. A pesar de todo lo vivido, Rubén tenía algo claro “nunca dejé de ir al colegio, sabía que a pesar de todo tenía que seguir estudiando” y fue esta fuerza que lo llevó a buscar ayuda y entrar voluntariamente a un centro de rehabilitación.


“Los primeros meses en el hogar fueron muy difíciles, pero sabía que tenía que seguir adelante, poco a poco fui mejorando. Algo que me ayudó muchísimo fue comenzar los talleres del Programa Adolescentes Protagonistas del Desarrollo,  necesitaba mejorar mi autoestima, aprender a quererme a mí mismo. Me ayudó a salir adelante y lograr cambiar”.

Rubén ya completó los tres módulos del programa Adolescentes Protagonistas del Desarrollo, “lo que más me gustó fue aprender jugando, me acuerdo mucho de las dinámicas y cuanto me divertía cada vez que iba, me gustaría volver a empezar”. Para su futuro él tiene algo muy claro, quiere tener su propio negocio: un hotel. Es por esto que fue tecnificado en administración hotelera, para poder aprender sobre el rubro, desde el doblado de servilletas, acomodado de cuartos hasta la forma correcta de tratar a un cliente, Rubén se destacó durante este proceso.

“Aprendí muchas cosas muy prácticas, por esto cuando tuve la entrevista de trabajo me fue muy bien. Ahora, estoy muy feliz de poder trabajar en un hotel de 5 estrellas en La Paz”. 

Gracias a su participación en el programa Rubén fue contratado en uno de los mejores hoteles de la ciudad de La Paz, ahí pasó por un periodo de prueba durante 3 meses, después del cual fue contratado de forma indefinida por el hotel “ahora mismo trabajo en la lavandería, mi jefe me dijo que soy el mejor del área y estoy seguro que pronto podré subir de puesto. Estoy muy feliz, tengo seguro médico y un sueldo cada mes, puedo ayudar a mi mamá para que ella no tenga que hacer tantos sacrificios, es lo mejor que me ha pasado en la vida”.

“Sé que no tengo que parar aquí, ahora con mi trabajo puedo pagar mi universidad y estudiar para tener mi propio negocio, mi propio hotel en un futuro. Quiero agradecerles por todo el apoyo que me han dado, porque todo lo que he aprendido en los talleres me está ayudando ahora, sé que puedo resolver cualquier problema y depende de mí seguir soñando y tener un mejor futuro. Gracias, porque sin su ayuda no lo habría logrado”.