Chuquisaca marca un hito: la Ley para promover a los Gabinetes de Atención Integral para Estudiantes (GAIE) protege a estudiantes desde las escuelas

El departamento de Chuquisaca en Bolivia ha dado un paso transformador al promulgar la Ley Departamental Nro. 597/2025, que institucionaliza los Gabinetes de Atención Integral para Estudiantes (GAIE). Esta norma responde a una problemática urgente: el incremento de casos de violencia al interior de las escuelas. Entre los años 2022 y 2024, más de 17.000 casos de violencia escolar fueron atendidos en el departamento, evidenciando la necesidad de servicios de apoyo psicosocial permanentes. Esta normativa fue impulsada por la Dirección Departamental de Educación y apoyada por la ONG Realidades en asocio con Save the Children, UNFPA y con el apoyo financiero de la Embajada de Francia.

Los GAIE son espacios seguros y gratuitos que brindan atención integral a niñas, niños y adolescentes, promoviendo su bienestar emocional, la educación integral en sexualidad y fortalecen el liderazgo estudiantil, abordando la violencia física, psicológica, sexual y digital. Operan en coordinación con servicios públicos como las Defensorías de la Niñez y Adolescencia y el sistema de salud, fortaleciendo la protección oportuna. El año pasado el 52 % de las niñas, niños y adolescentes atendidas fueron mujeres, y el 60 % eran adolescentes entre 11 y 18 años.

Maestras y maestros dinamizadores, junto a equipos de psicología, pedagogía y trabajo social, lideran los GAIE, ofreciendo orientación, escucha activa y derivación de casos. La ley fue construida de forma participativa con familias, estudiantes, directores y autoridades educativas en encuentros distritales y congresos departamental.

El impacto es claro: los GAIE no solamente detectan y canalizan casos de violencia, sino que generan una cultura de prevención y cuidado en las escuelas. Este avance legislativo es replicable en otros departamentos del país y demuestra que el trabajo colaborativo entre sociedad civil, Estado y cooperación internacional puede traducirse en políticas públicas sostenibles con alto impacto para la niñez y adolescencia.